Arreglando el Kindle

Pues resulta que en el último viaje a Madrid, a mi maravilloso Kindle se le rompió la pantalla. Imagino que sería un golpe mal dado, un cambio en la presión de cabina, o que estaba muy apretado en la maleta.

Me puse en contacto con Amazon, que la verdad son bastante eficientes en esto del servicio al cliente. Pero como el kindle me lo había comprado en EEUU, me desviaron a los de allí. Y los de allí me dijeron que no se podía arreglar (fuera de garantía), y que lo único que podían ofrecerme era un descuento para comprar un modelo más nuevo, pero sin conexión 3G mundial (eso servía para poder navegar y comprar en Amazon en cualquier lugar del mundo, sin necesidad de wifi). Pero los gastos de envío se comían el descuento, y al final salía lo mismo comprarme uno aquí (que por cierto, si vais a compraros uno, intentad comprarlo en Amazon Alemania o Italia, que sale entre 20 y 30€ más barato, incomprensiblemente).

Así que empecé a buscar maneras de arreglar un kindle con la pantalla rota, y no era tan complicado. Lo primero era probar a desmontar, y quitar la vieja pantalla. Salvo porque es un poco difícil quitar la carcasa trasera, el resto es tornillería y despegar la pantalla de la carcasa frontal.

El segundo paso fue pedir una pantalla a los chinos. Y esperar a que me llegara… Más de un mes, la maldita. Y cuando llegó… Pues la calidad dejaba mucho que desear.

Afortunadamente el portal chino funciona bastante bien, y hasta que tu no das el visto bueno no le pagan al provedor. Le puse una reclamación, no contestó, y me devolvieron la pasta.

Descartadas las pantallas chinas, busqué por ebay y segundamano algún kindle 3 de segunda mano averiado pero con la pantalla perfecta. Encontré uno que lo vendía en Barcelona, y por 30€ ya tenía una pantalla esperándome en El Puerto.

Y estas navidades terminé la operación. Más feliz que una perdiz.